MISTERIOS DOLOROSOS

DÍAS: MARTES Y VIERNES

“Los Evangelios dan gran relieve a los misterios del dolor de Cristo. (…). Los misterios de dolor llevan al creyente a revivir la muerte de Jesús poniéndose al pie de la cruz junto a María, para penetrar con ella en la inmensidad del amor de Dios al hombre y sentir toda su fuerza regeneradora”. (Juan Pablo II. Carta Apost. “Rosarium Virginis Mariae”).

Nos Signamos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo

Pedimos por nuestras Intenciones

Rezamos el Credo

Rezamos un Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Los misterios…

1º Misterio Doloroso

LA AGONÍA DE JESÚS EN EL HUERTO

Padrenuestro.

1. Así llegó Jesús con ellos a una finca llamada Getsemaní y les dijo: sentaos aquí mientras yo voy allá a orar; y comenzó a entristecerse y angustiarse. (Mt. 26; 36, 37).Avemaría.

2. Y exclamó: siento en mi alma angustias de muerte. Aguardad aquí y velad conmigo. (Mt. 26, 38). Avemaría.

3. Adelantándose unos pasos y cayendo rostro en tierra, pedía a Dios que, a ser posible, hiciera que no sonase para El aquella hora. (Mc. 14, 35). Avemaría.

4. Padre, si quieres, aparta de Mí este cáliz. Pero no se haga mi voluntad sino la tuya. (Lc. 22, 42). Avemaría.

5. Se le apareció entonces un Angel del Cielo infundiéndole valor. (Lc. 22, 43). Avemaría.

6. Y, poseído de angustia mortal, oraba con mayor intensidad. (Lc. 22, 44). Avemaría.

7. Y sudó como gruesas gotas de sangre, que iban corriendo hasta la tierra. (Lc. 22, 44). Avemaría.

8. Y volviendo a sus discípulos, los encontró durmiendo; dijo a Pedro: ¿Con que no habéis sido capaces de estar una hora en vela conmigo?. (Mt. 26, 40). Avemaría.

9. Velad y orad para no caer en la tentación. (Mt. 26, 41). Avemaría.

10. Cierto que la voluntad está pronta, pero el cuerpo es débil. (Mt. 26, 41). Avemaría.

Gloria.

Jaculatorias.

2º Misterio Doloroso

LA FLAGELACIÓN DEL SEÑOR

Padrenuestro.

1. Después de haber atado a Jesús, le llevaron y le entregaron a Pilato. Pilato le preguntó: ¿eres Tú el Rey de los Judíos?. (Mc. 15, 1-2).Avemaría.

2. Respondió Jesús: mi Reino no es de este mundo. Tú lo dices: Yo soy el Rey. (Jn. 18, 36). Avemaría.

3. Para esto he nacido Yo y para esto he venido al mundo: para dar testimonio de la Verdad. (Jn. 18, 37). Avemaría.

4. Pilato dijo a los Sumos Sacerdotes y a la gente: ningún delito encuentro en este hombre. Así que le castigaré y le soltaré. (Lc. 23; 4, 16). Avemaría.

5. Tomó entonces Pilato a Jesús y lo mandó azotar. (Jn. 19, 1). Avemaría.

6. Tras arresto y juicio fue arrebatado. Y de su causa, ¿quién se preocupa? Despreciable y desecho de hombres, varón de dolores y sabedor de dolencias. (Is. 53; 8, 3). Avemaría.

7. Fue oprimido, y Él se humilló y no abrió la boca. Como un cordero al degüello era llevado, y como oveja que ante los que la trasquilan está muda, tampoco El abrió la boca. (Is. 53, 4). Avemaría.

8. Él ha sido herido por nuestras rebeldías, molido por nuestras culpas. (Is. 53, 5). Avemaría.

9. ¡Y con todo eran nuestras dolencias las que El llevaba y nuestros dolores los que soportaba!. (Is. 53, 4). Avemaría.

10. Él soportó el castigo que nos trae la paz y con sus llagas hemos sido curados. (Is. 53, 5). Avemaría.

Gloria.

Jaculatorias.

3º Misterio Doloroso

LA CORONACIÓN DE ESPINAS

Padrenuestro.

1. Los soldados lo condujeron dentro del atrio, o sea, al pretorio, y le vistieron de púrpura. (Mc. 15, 16; Mt. 27, 28). Avemaría.

2. Y trenzando una corona de espinas, se la pusieron sobre su cabeza, y en su mano derecha una caña. (Mt. 27, 29). Avemaría.

3. Después doblaban la rodilla delante de El, y le hacían burla diciendo: ¡Salve, Rey de los judíos!. (Mt. 27, 29). Avemaría.

4. Y le escupían y le quitaban la caña para golpearle en la cabeza. (Mt 27, 30). Avemaría.

5. Salió Pilato otra vez fuera, y les dijo: mira, os lo voy a sacar fuera para que sepáis que no encuentro en El culpa alguna. (Jn. 19, 4).Avemaría.

6. Salió entonces Jesús fuera, llevando la corona de espinas y el manto de púrpura. (Jn. 19, 5). Avemaría.

7. Les dice Pilato: aquí tenéis al Hombre. Ellos decían: ¡Fuera, fuera! ¡Crucifícale!. (Jn. 19; 5, 15). Avemaría.

8. Pues, ¿qué mal ha hecho? Y ellos cada vez más fuerte gritaban: ¡Crucifícalo! . (Mc. 15, 14). Avemaría.

9. ¿A vuestro Rey voy a crucificar? Replicaron los Sumos Sacerdotes: no tenemos más rey que el César. (Jn. 19, 15). Avemaría.

10. Entonces lo puso en sus manos para que lo crucificasen. Se apoderaron, pues, de Jesús. (Jn. 19, 16). (Lc. 2, 19). Avemaría.

Gloria.

Jaculatorias.

4º Misterio Doloroso

LA CRUZ A CUESTAS

Padrenuestro.

1. Si alguno quiere venir en pos de Mí, niéguese a si mismo. (Lc. 9, 23). Avemaría.

2. Tome su cruz cada día, y sígame. (Lc. 9, 23). Avemaría.

3. Y Él llevando su cruz salió en dirección del lugar llamado Calvario, en arameo, “Gólgota”. (Jn. 19, 17). Avemaría.

4. Y, según lo llevaban, echaron mano de un tal Simón de Cirene, y le cargaron con la cruz para que la llevase detrás de Jesús. (Lc. 23, 26).Avemaría.

5. Tomad sobre vosotros mi yugo y aprended de Mí. (Mt. 11, 29). Avemaría.

6. Que yo soy manso y humilde de corazón. (Mt. 11, 29). Avemaría.

7. Y hallaréis descanso para vuestras almas. Porque mi yugo es suave y mi carga ligera. (Mt. 11; 29, 30). Avemaría.

8. Le seguía una gran muchedumbre de pueblo y de mujeres que se golpeaban el pecho y hacían duelo por El. (Lc. 23, 28). Avemaría.

9. Jesús, volviéndose a ellas dijo: hijas de Jerusalén, no lloréis por Mí; llorad más bien por vosotras y por vuestros hijos. (Lc. 23, 28).Avemaría.

10. Porque si en el leño verde hacen esto, en el seco, ¿qué se hará?. (Lc. 23, 31). Avemaría.

Gloria.

Jaculatorias.

5º Misterio Doloroso

LA CRUCIFIXIÓN Y MUERTE DE NUESTRO SEÑOR

Padrenuestro.

1. Cuando llegaron al lugar llamado Calvario, crucificaron ahí a Jesús. (Lc. 23, 33). Avemaría.

2. Jesús decía: Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen. (Lc. 23, 34). Avemaría.

3. Uno de los ladrones crucificados con Él decía: Jesús acuérdate de mí cuando vayas a tu Reino. (Mt. 27, 44; Lc. 23; 39, 42). Avemaría.

4. Jesús le dijo: Yo te aseguro, hoy estarás conmigo en el Paraíso. (Lc. 23, 43). Avemaría.

5. Jesús, viendo a su Madre, y junto a Ella al discípulo que El amaba. (Jn. 19, 26). Avemaría.

6. Dijo a su Madre: mujer, he ahí a tu hijo. Luego dijo al discípulo: he ahí a tu Madre: (Jn. 19, 26-27). Avemaría.

7. Y desde aquel momento el discípulo la recibió consigo. (Jn. 19, 27). Avemaría.

8. El sol se oscureció y el velo del templo se rasgó por la mitad. (Lc. 23, 45). Avemaría.

9. Y Jesús, con una voz fuerte, exclamó: Padre, en tus manos encomiendo mi Espíritu. (Lc. 23, 46). Avemaría.

10. Inclinó la cabeza y entregó el Espíritu. (Jn. 19, 30). Avemaría.

Gloria.

Jaculatorias

¡Oh! mi buen Jesús, perdona nuestros pecados, líbranos del fuego del infierno, lleva al cielo a todas las almas, especialmente a las más necesitadas de Tu misericordia.

María, Madre de gracia, Madre de misericordia, en la vida y en la muerte ampáranos madre nuestra.

Salve

Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra; Dios te salve. A Ti clamamos los desterrados hijos de Eva; a Ti suspiramos, gimiendo y llorando, en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora, abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos; y después de este destierro muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre. ¡Oh clemente, oh piadosa, oh dulce siempre Virgen María!

V.Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios.

R.Para que seamos dignos de alcanzar las promesas y gracias de Nuestro Señor Jesucristo. Amen

Pedimos por las Intenciones del Santo Padre y para ganar indulgencias.

Rezamos un Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Nos Signamos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo

Amen…

"¡Quien propaga el Rosario se salva!" ... Beato Bartolomé Longo

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